Hoy tengo la narración (y la respiración) rota ... hace un momento he vuelto a ti, ...tus ropas y tu olor... caminaba más con la emoción que con la nostalgia del viajero... y me he sentido como en uno de esos cuadros de Francis Bacon: con la mandíbula desencajada y rota de desesperación -por unos instantes-. Y volveré a sentirme ave nocturna, un búho si acaso. Búho, figura de la pesadilla, de la noche siniestra, de la mala noche. Llegarán los juegos y te haré jaque mate cuando menos te lo esperes. Te llevaré a Barcelona y nochearé contigo hasta el amanecer, hablando de las estrategias necesarias para robarte algún beso. Por la mañana, cuando el sol fatigue nuestra habitación y yo me sienta un vampiro, bajaré las persianas y te leeré algún poema de Cristina Peri Rossi...